Hace un tiempo dije que quería enamorarme, que quería sentir “eso” que hace que te emociones cuando ves a la persona que te gusta, cuando hablas con él, cuando te abraza o cuando piensas en él sin que lo sepa y es que al principio esa persona no lo sabe, luego de mil indirectas recién se entera.
Me siento así y me gusta, estoy enamorada y se nota, ya me lo han dicho y eso también me gusta, ¡me gusta todo! Me gusta él, sus abrazos, sus besos, su sonrisa, sus sms, su compañía, su responsabilidad, su paciencia, su sinceridad… TODO, porque es mejor de lo que imaginaba, porque él es mi mejor amigo y ahora mi enamorado.
Ya no puedo escribir de él porque ya lo hice, hoy escribo sobre mí.
Lo conocí hace casi un año atrás, estaba en una de mis clases pero hasta ese entonces era solo un chico más. Meses después viajamos a Disney (sí ese viaje que me hizo pasar los mejores tres meses de mi vida) y ahí sí puedo decir que empecé a notar su “presencia”. Iba a mi casa buscando a mi amiga para que vayan a la iglesia los domingos y según yo ahí fue donde empecé a hablarle más, pero la verdad es que no lo recuerdo bien (como muchas cosas) y en realidad eso es lo bonito de la amistad… nunca sabes como empezó, simplemente sabes que está ahí.
Y así de un momento a otro pasó de ser un perfecto desconocido a una de las personas con las que pasé la mayor parte del viaje. Era divertido, era mi amigo y podía hablar con él de lo que sea, podíamos bromearnos y molestarnos mutuamente y la pasábamos bien. No sé tampoco cuando fue que se volvió mi mejor amigo pero sé que fue regresando de nuestro viaje, cuando empezamos a conocernos más a hablar más y a compartir más cosas. Hasta que un día compartimos cosas muy privadas (como este blog) y nos sentimos bien haciéndolo…
Siempre fue muy atento conmigo, cariñoso, amable y muuuuy lindo, cuando me di cuenta de eso fue que empecé a verlo como algo más. Me parecía raro que me gustara eso; yo no suelo ser muy cariñosa ni muy linda, soy una persona más bien sarcástica y eso no me hace muy amable que digamos, claro que no soy mala, simplemente un poco fría. Muchas veces he escuchado eso de “los opuestos se atraen” y puedo decir que es una verdad a medias, porque si fuera completamente opuesto a mí lo odiaría y no es así. Me gusta que tengamos muchas cosas parecidas en cuanto a nuestra forma de pensar y demás y también que tengamos ciertas diferencias porque así es como mi complemento o media naranja (:
Ando en las nubes, vivo volando y me derrito como mantequilla con cada cosa que dice y/o hace y puedo confirmar que se siente bonito estar así enamorada, se siente bonito ser cursi (a veces), se siente bonito tener a alguien, se siente bonito querer y sentirme querida, se siente bonito emocionarme cuando lo veo, se siente bonito estar con él (“estar” de pasar tiempo juntos y “estar” de que sea mi enamorado). Me encanta sentir todo esto y más aún que sea por él; porque cada uno de estos 30 días juntos ha valido la pena, porque todas esas 720 horas que pensé en él lo valen, porque quisiera que el día tuviera 25 horas y la semana 8 días para poder quererlo un poquito más.
Te quiero y me enamoro de ti cada día más… ¿qué más puedo decir? solo que eres GENIAL